sábado, 9 de mayo de 2009

A propósito de la comunicación con Laura


El valor de la comunicación estriba no sólo en la información que compartimos, sino también en las emociones que compartimos.
En los primeros momentos de la entrevista, una sonrisa, una mirada directa y franca, una palabra de bienvenida dicha en tono y manera cordial..., todo ello colorea el espacio de buenas vibraciones.

Hay varios momentos clave en cada encuentro:
Cuando recibimos al paciente: nunca tendremos una segunda oportunidad de causar una primera buena impresión.
El segundo momento clave es cuando preguntamos. ¿Qué valora el paciente?
Pues, sobre todo, nuestra atención. Si en la manera de recibirle juzgaba la cordialidad,
ahora lo que trata de captar es si su caso nos interesa o si, por el contrario, lo descartamos antes de tener datos suficientes. Los pacientes son muy listos, de manera que asumen que si tenemos bastantes datos pasamos a la fase resolutiva de la entrevista. Pero si quedan cosas importantes por decir, y si tratando de decirlas
no les dejamos..., nos suspenden.
El tercer momento clave es cuando declaran o nos informan de aspectos íntimos. O cuando nos ofrecen una sonrisa. Aquí la empatía debe ser nuestra piedra de clave y hacer al paciente que se sienta comprendido, acogido y correspondido
Finalmente, la despedida. Toda la entrevista puede haber funcionado con corrección, pero en el último minuto se estropea... porque de nuevo aflora la impaciencia. Imagine que el paciente nos dice: “¿nos vemos en una semana ó así para seguir hablando de esto?”, y usted responde exasperado: “¡No, no!, con que venga en un mes ya vale”, en un tono de impaciencia que delata que estábamos deseando que se marchara, en vez de decirle: “pues me parece bién que nos veamos en un mes aproximadamente para seguirle controlando este proceso como se merece”, con lo que el paciente saldrá más reconfortado aún y con la impresión de que nos preocupamos por su problema.

Todo esto no se valora en la cartera de servicios, y si embargo la comunicación con el paciente es la clave que debería guiar todo el proceso. La comunicación con el paciente es como los ceros en matemáticas: puestos a la izquierda no valen nada pero si los ponemos a la derecha multiplican el valor de lo que teníamos.
Tomado de blog el Bálsamo de Fierabrás

12 comentarios:

isabel ortiz dijo...

La comunicación y la escucha activa permiten muchas veces ayudar al paciente y al profesional que lo atiende.Hay estudio que indica que una buena vinculación aumenta la sinapsis en el cerebro, por ende baja la angustia y el miedo.
Esto también ocurre en nuestro diario vivir. ISA

anahid dijo...

Claro que baja la angustia y nos clarifica.
Es importante que tomemos cociencia nuestro lenguaje no verbal y del otro en comunicacion como posturas, mirada, proximidad física, etc...

kenia dijo...

La buena comunicación facilita el entendimiento, pero para ello necesitamos un excelente lenguaje verbal y no verbal ligadas a una hábil escucha activa y calidad de trato como persona, siempre pensar en como nos gustaría que nos traten, colocarse en el lugar del otro.

Caroblanco dijo...

Generalmente los pacientes se quejan mucho de la calidad de atención de los Centros de Salud. Es bueno que comencemos a cuestionarnos.......

anahid dijo...

ser criticos y autocriticos, no normalizando malas practicas

Dr. José Luis Contreras dijo...

El otro día vi como un paciente que había demorado 5 meses en consultar ,lo primero que dijo quien lo atendió fue decirle ¿porque demoró tanto en venir?
Importa eso si ya el vino?

Carolina Carrasco dijo...

Como profesionales de la salud es importante "ser concientes" y "autocríticos" de nuestro lenguaje verbal y no verbal...en la atención usuaria e incluso en lo que proyectamos cuando estamos fuera de nuestro box....el ser concientes y críticos nos da la oportunidad aprender de los errores y potenciar habilidades comunicacionales efectivas

anahid dijo...

Uno puede formular una pregunta a un paciente si esta tiene una finalidad de obtener antecedentes para el tratamiento o la terapia. Lo importante es la manera como se formula y tomar conciencia si es útil plantearla o si por otro lado en el fondo hay una crítica de base por lo que no correspondería realizarla.

lonka dijo...

Estoy de acuerdo con Anahid, en buscar el sentido de las preguntas, el sólo hacerlo para acumular información a veces lo que hace es satisfacer "nuestra curiosidad" pero no tiene trascendencia en lo que hoy le interesa a nuestro usuari@.
Y tambien me parece que la escucha activa : consiente y respetuosa al otr@ es fundamental como base del vínculo, tener y hacer esto consiente es desafio diario.....

rossana dijo...

La calidad , cantidad de atencion e importancia que le demos a la misma es la base de un buen entendimiento entre medico y pacte. Brindar confianza y expresar deseos de servir al paciente es una de las cualidades mas importantes que debemos tener.Saludarlo cuando entra al box,pedirle que tome asiento,mirarlo de frente,preguntarle en que le podemos servir,siempre una sonrisa sincera y tratar de solucionar ciertos problemas nosotros mismos,como bajar a un pacte.que presenta una hta de 200/110 y anda solo a curaciones,ayudar a un pcte no vidente a bajar las escalesras,indicar correctamente algo cuando nos consultan,tener paciencia con aquellos pacientes groseros,altaneros,sin llegar a que nos falten el respeto.Saber escuchar y entender,cumplir nuestro objetivo que es ayudar y solucionar lo mas pronto posible los problemas del pacte. ,brindar alternativas,abrir caminos,atenderlos con cariño,con verdadera vocacion.

nellynayar dijo...

buen documento, pero hay veces que el tiempo apremia y la necesidad de avnazar con el otro paciente, pero de todas formas es muy valido

Claus dijo...

Comentario tardío pero válido.
Quizás no importe "el por qué" el paciente tardó en venir. Pero su motivo del por qué tardó, nos puede ser de utilidad para revertirlo y mostrárselo al paciente, no en tono de crítica ni jucio, sino, como daño o riesgo a su salud por la imposibilidad de controlarlo y/o tomar medidas pertinentes e inmediatas, a cualquier alteración que éste presentara, que en su tiempo de ausencia era imposible de realizar. Esto nos permitirá enseñarle al paciente que en SU SALUD EL TIEMPO ES PRECIOSO Y DEBEMOS APROVECHARLO EN SU BENEFICIO.